Qué hacer en Manhattan gratis: guía a pie para enamorarte de Nueva York

¿Nueva York es una ciudad cara? Sí, pero todo es cuestión de perspectivas: si lees esta guía o ves el video sabrás qué hacer en Manhattan gratis y verás que es posible disfrutar de muchas cosas en la ciudad sin gastar un sólo dólar.
Y no se trata de renunciar a conocer Nueva York y conformarte con lo gratis, sino más bien al contrario.
Si estás dispuest@ a dejar de lado los tours carísimos* (y cada vez más empaquetados) y volcarte a una auténtica experiencia neoyorquina vas a ver que la ciudad es absolutamente increíble cuando te dedicas a caminarla.
Esta es una ruta a pie dónde vas a enamorarte de Manhattan sin abrir la billetera.
Caminar por lugares icónicos, disfrutar del arte, la historia, arquitectura, cultura y los contrastes que hacen de Nueva York una ciudad única en el mundo.
Al final de esta guía te dejamos un mapa con la ruta completa.
Nuestra guía en video
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Si todavía no decidiste dónde alojarte en Nueva York, esta guía va a ayudarte a encontrar el mejor hotel al mejor precio. Si estás sin tiempo, echale un vistazo a nuestro hotel favorito en Nueva York, te va a encantar.
*Estos tours gratuitos sí valen la pena para explorar la ciudad
- Nuestra guía en video
- La Quinta Avenida: Las tiendas más caras del mundo
- Flatiron District y Madison Square Park
- Washington Square y el Village: bohemia entre arte callejero y edificios de ladrillos rojos
- West Village, la continuación natural de esta ruta
- SoHo, Chinatown y los contrastes que solo verás en Nueva York
- Wall Street, Stone Street y el Distrito Financiero: la historia real de Nueva York
- South Street Seaport: la antigua zona portuaria y poca explorada de Manhattan
- Recursos que te recomendamos para tu viaje a Nueva York
- Mapa con la ruta mostrada en el video
La Quinta Avenida: Las tiendas más caras del mundo

Empezamos por acá. Y te recomendamos que lo hagas aunque ya hayas estado en Nueva York y visitado la 5ta.
Es como recorrer un paisaje de cuentos de hadas pero lujoso y contemporáneo.
Entre vitrinas increíbles, joyerías cinematográficas como Tiffany´s y edificios emblemáticos como The Plaza Hotel, vas a experimentar una de las vivencias culturales más constantes de Manhattan: el contraste entre lo exclusivo y lo público.
Si vas a empezar tu recorrido temprano en la mañana, no dejes de detenerte en uno de esos breakfast cars para ir por tu desayuno neoyorquino.
Cuestan poco y es una experiencia local absoluta. Café y bagel con creamcheese, rápidos, ricos y baratos.
Después toca caminar entre tiendas como Tiffany´s, Saks o Cartier, ver el edificio dónde trabajaba Chandler (sí, el amigo de Joey), el “edificio de baúles gigantes”, de Louis Vuitton, el Rockefeller Center o la tienda transparente de Apple.
El paseo llega hasta la 59 dónde vas a empezar a recorrer uno de los parques más famosos del planeta: Central Park.

Central Park naturaleza y calma en la gran ciudad
Lo primero que vas a notar cuando entres al Central Park es la transición del bullicio de la ciudad a la calma absoluta, al silencio y al crujido de la nieve o las hojas, según la estación.
Nosotros llegamos por la entrada de la 5ta Avenida y la 59, donde a unos metros vas a ver los primeros lagos, puentes y el skyline del Midtown que empieza a dibujarse en el cielo a medida que sigas andando hacia el norte.
La última vez que estuvimos (como verás en el video), el sol empezó a brillar sobre la nieve congelada, las ardillas bajaban de los árboles, y los sonidos de la naturaleza se hacían más fuertes a medida que nos perdíamos entre senderos ondulados y arboledas frondosas.
Aquí nuestra recomendación es que camines libremente y hasta que te pierdas un poco.
En todo caso usa la app oficial del Central Park para orientarte y saber dónde están los spots más conocidos.

Hay miradores naturales, formaciones de rocas para subir y ver los paisajes desde arriba, bancos solitarios, puentes románticos y zonas donde casi no hay gente.
Cuanto más al norte vayas, más tranquilidad vas a encontrar.
Otros edificios emblemáticos por la 5ta avenida
Ahora toca empezar a caminar hacia el sur y alejarse de la zona de tiendas (no dejes de entrar a conocer el lobby del Hotel Plaza, es una locura)
Una de las maravillas de Manhattan es que sus edificios son joyas arquitectónicas para admirar mientras paseamos y a muchos otros vas a tener que entrar para disfrutarlos al máximo.
La Catedral de San Patricio
Frente al Rockefeller Center es una parada obligada. Entrar es gratis y es un mundo majestuoso y solemne de silencio, arte, vitrales y espiritualidad. Muchas veces hay coros o servicios en curso, que suman a la experiencia.
Biblioteca Pública de Nueva York

Sobre la 42 y Quinta Avenida. Es imponente desde su fachada y absolutamente espectacular por dentro. Techos altísimos, vitrales y salas de lectura magníficas que valen la pena recorrer.
Grand Central Station
Casi un monumento histórico. Es imponente con su techo con constelaciones doradas, escaleras de mármol, y su espíritu nostálgico de antigua estación de trenes.
Buscá el rincón del Whispering Wall (muro de los susurros), donde podrás susurrarle a la pared mientras otros te escucharán al otro lado del muro.
También hay un pequeño pero acogedor mercado de comidas, un bar de ostras y un Apple Store.
Cuando salgas por la 42, debajo del puente que atraviesa la estación, vas a ver un cartel de neón rojo que dice Central Café.
Es Pershing Square un antiguo bistró neoyorquino, clásico y tradicional. Increíble para tomarte unas fotos con aire vintage.
Empire State

Siguiendo por la 5ta hacia el sur vas a ver aparecer el icónico edificio. 102 pisos de puro art decó. Otra de las postales clásicas de Nueva York.
Si tu presupuesto lo permite y vas a elegir un mirador, este es sin dudas el que te recomendamos.
No sólo por sus vistas, sino también por su recorrido interior donde verás cómo se construyó uno de los edificios más famosos del mundo.
Si ese es tu plan te recomendamos que reserves el ticket con anticipación. Podrás hacerlo desde aquí.
Flatiron District y Madison Square Park

Si hay un lugar donde se respira la pura atmósfera neoyorquina es aquí.
Es una de las postales más hermosas de la ciudad. Su aire local te va a llevar al Nueva York de los 60, rodeado de bajos rascacielos de la primera mitad del siglo XX, coronados por el espectacular Flatiron Building.
Ahí nomás está el Madison Square Park, una plaza hermosa para admirar el paisaje urbano y ver a los neoyorquinos descansar un rato durante su día de trabajo.
El Flatiron District es una zona para recorrerla con calma, sentarse a disfrutar de un buen café o de un almuerzo ligero en Eataly (un “patio” de comida italiana), sacarse hermosas fotos y absorber todo el estilo local antes de seguir andando.
Washington Square y el Village: bohemia entre arte callejero y edificios de ladrillos rojos

El Washington Square Park es uno de los lugares más encantadores de Manhattan, y nuestro parque favorito de todo Nueva York.
Allí se junta todo: estudiantes de NYU, artistas callejeros, bohemios, viajeros y locales.
Recorrerlo es toda una aventura.
Es el lugar dónde pasan las cosas que solo pasan en Nueva York.
Nos regalaron una manzana como parte de un challenge, vimos un concertista tocando su piano de cola bajo el magnífico arco que corona la 5ta avenida y un poeta nos escribió un poema con una máquina de escribir inspirado en nuestra forma de caminar .
Música en vivo, malabares, bailarines, pintores y grupos de debates. Todo se mezcla en un lugar que vibra por sí solo.
West Village, la continuación natural de esta ruta
El Village es una zona residencial de casas bajas con escaleras de 10 peldaños y edificios de ladrillos rojos, donde conviven teatros de stand up, tiendas y pequeños restaurantes locales.

Es ese paisaje que aparece en nuestro imaginario cada vez que pensamos en Nueva York.
Aquí están esas calles adorables entre cafés de diseño (imperdibles Stumptown Café y Porto Rico Importing And Co.), carteles de neón y hermoso callejones curvos que contienen pisos de fines del siglo XIX y principios del XX.
Para absorber toda la atmósfera del Village, hay que caminar por Mac Dougal y Blecker St. entre bares, cafeterías y negocios curiosos.
Lo más bello de la zona residencial está en Gay Street, Groove o Charles Street.
No dejes de visitar Three Lives Company, un acogedora librería independiente que parece salida de una película de Woody Allen (aunque siempre nos hace acordar a la que tenía en personaje de Meg Ryan en “You´ve got a mail“)
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SoHo, Chinatown y los contrastes que solo verás en Nueva York
SoHo

Siguiendo la ruta del Village hacia el sur vas a cruzar Houston Street, el límite norte del emblemático barrio del Soho.
Un precioso compilado de antiguos edificios elegantes con escaleras de hierro a la vista y calles adoquinadas, entre galerías de arte y tiendas sofisticadas.
El SoHo es una mezcla de lujo y bohemia que guarda la historia de muchos de los artistas contemporáneos más renombrados.
Chinatown
Para llegar del SoHo a Chinatown hay que atravesar Canal Street y caminar hacia el oeste.
Tal vez este sea uno de los momentos más contrastantes de esta ruta.
El cambio entre estos dos barrios no tiene transición alguna.
De la calma elegante y bohemia del SoHo a las calles bulliciosas y desordenadas del Chinatown se llega sin escalas.
El cambio es brutal.
Para llegar al corazón de Chinatown, Manhattan, vas a caminar unos 15 minutos por Canal Street hasta llegar a la calle Mott (algo así como la Main Street no oficial del Barrio Chino).
Faroles rojos, tiendas con nombres en mandarín, callejones históricos que fueron escenario de luchas a muerte entre pandillas durante los primeros años de Nueva York (Doyers Street).
Aquí también podrás recorrer lo que queda de la mítica Little Italy, cada vez más absorbida por Chinatown.
Este es un buen lugar para comer auténtica comida china a muy buen precio en pequeños restaurantes diseminados por todo el barrio.
Y aunque es un lugar bastante controversial, poco valorado por la mayoría de los viajeros; creenos que el Barrio Chino de Manhattan es un lugar que vale mucho la pena explorar.
Hace unos años grabamos este video dónde te mostramos el lugar a fondo y te contamos por qué es imperdible.
Recomendación: El tour Contrastes de Nueva York de Civitatis es espectacular para profundizar en las características, historias y personalidades de los distintos barrios. Cuesta $49 por persona. ¡Vale cada centavo!
Wall Street, Stone Street y el Distrito Financiero: la historia real de Nueva York

Wall Street es el centro del poder económico del mundo.
Pero entre bolsas de valores y edificios que guardan el dinero del planeta, Wall Street es también una de las calles más antiguas de la ciudad.
Aquí vas a ver una de las primeras iglesias asentadas en Nueva York que es la Trinity Church, con su hermosa arquitectura y su cementerio lleno de personalidades de la época revolucionaria.
También está el edificio del Federal Hall, en cuyas escaleras George Washington dió uno de sus discursos más famosos.
Nuestro lugar favorito en la zona del Distrito Financiero de Manhattan es Stone Street.
Una callecita adoquinada, con fachadas antiguas que parecen un set de cine.
Una zona atrapada en el 1600 rodeada de los modernos rascacielos de Manhattan.
Otro spot imperdible es el antiguo edificio de Delmonico´s, uno de los restaurantes históricos de Nueva York (hoy cerrado).
Vas a reconocer su fachada como el Hotel Continental de la zaga John Wick.
Hay algo de misticismo en esta zona que trasciende su popularidad turística.
Es la única parte de la ciudad que no tiene un trazado en cuadrícula, sino que quedó con su forma original de calles diagonales y callejones angostos sobre los cuales se construyeron los grandes edificios que marcan el skyline de Manhattan.
El efecto es sobrecogedor, casi hipnotizante.
Nuestra recomendación: visita esta zona por la tarde cuando ya se fueron los banqueros y la mayoría de los viajeros y llega la calma. Eso va a dejarte en total libertad para explorar el Distrito Financiero casi en soledad y sin ruidos molestos.
South Street Seaport: la antigua zona portuaria y poca explorada de Manhattan

Si bien es un lugar cada vez más popular, todavía nos gusta pensar en South Street como una joya oculta en Nueva York.
Es una antigua zona portuaria reconvertida en paseo gastronómico, cultural y de entretenimiento.
Tiene librerías, pequeños locales para comer, bancos al aire libre y una vista increíble a Brooklyn (puente incluído) al final de la calle.
Todavía son pocos los viajeros que pasan el rato en este lugar y eso lo hace más especial.
Es un sitio perfecto para terminar el recorrido, descansar las piernas y disfrutar del skyline de Manhattan (calcula el tiempo para estar allí por la noche) y despedirte del día con una imagen inolvidable.
Recursos que te recomendamos para tu viaje a Nueva York
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Mapa con la ruta mostrada en el video

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